Con el fin de mejorar la eficiencia energética y relevar otras cuestiones técnicas, una delegación de especialistas del INTI y de empresas nacionales del rubro de la construcción viajaban este martes a la base Marambio.
La principal base de Argentina en la Antártida tiene una superficie cubierta que supera las dos hectáreas y una capacidad para albergar a más de 100 personas.
Actualmente, especialistas del INTI están trabajando en el lugar para mejorar la eficiencia energética y reducir el consumo de su principal recurso: el “gasoil antártico”, que tiene un costo elevado si se toman en cuenta los gastos de transporte por avión y helicóptero que se requieren para su traslado.
Para conocer las condiciones ambientales de la base, se realizó un relevamiento sobre el consumo energético y se diseñó un sistema (de hardware y software) para monitorear de manera remota tanto la temperatura como la humedad.
“A partir de este análisis, pudimos detectar que la aislación térmica del edificio es deficiente porque genera descensos abruptos de la calefacción (en menos de 15 minutos pasa de 20 a 12 grados)”, detalla Tomás Bernacchia, del INTI, que integra el equipo de trabajo junto a otros especialistas de las áreas de Ambiente, Construcciones, Electrónica e Informática, Energía, Procesos Superficiales y Tecnologías Sustentables de ese instituto.
Una de las acciones previstas será colocar paneles de lana de vidrio en las paredes interiores, puertas herméticas y ventanas con triple vidriado, para reducir la pérdida de calor. Además, instalarán mingitorios secos, aireadores en los grifos y mochilas de descarga dual en los inodoros, para ahorrar hasta un 50% del consumo de agua.
Durante el viaje, técnicos del INTI y representantes de empresas brindarán un taller teórico-práctico con el objetivo de dejar capacidades instaladas en la base para que quienes trabajan en el lugar puedan continuar con las labores de reparación edilicia. Por ejemplo, van a realizar un recambio de las ventanas del acceso principal y van a explicarles cómo instalarlas para que luego puedan replicarlo en los otros ambientes
“La idea de esta iniciativa es que los fabricantes nacionales puedan desarrollar productos avalados por el INTI, que tengan buenas prestaciones para lograr una reducción del consumo energético y para soportar condiciones climáticas adversas como las que se presentan en la Antártida. A futuro, también está previsto que quienes cumplan con determinados requisitos puedan acceder a un sello”, subraya Bernacchia.
En este sentido, hasta el momento se sumaron a la iniciativa las empresas Dow Argentina, Durlock, Knauf, Ferrum, FV, ISOVER Saint Gobain, La casa de los cristales, Padilla, Tecnoperfiles y Vasa.
“Las situaciones extremas como las que encontramos en el continente blanco generan desafíos de diseño y desarrollo. Mejorar la eficiencia energética en un lugar tan inhóspito como la base Marambio será una muestra de que este trabajo se puede replicar no sólo en cualquier lugar de Argentina sino también del mundo”, concluye Bernacchia.
Fuente: Clarín