22 de diciembre de 2024

Una familia pionera en energía sustentable en Argentina.

Una planta en un país latinoamericano está utilizando tecnología innovadora para generar electricidad completamente a partir de desechos orgánicos industriales.

La planta Helios Clean Energy está ubicada en un terreno de seis hectáreas en la zona rural de Estesian General Paz, aproximadamente a 30 km al norte de Córdoba, Argentina.

La planta, que se inauguró el pasado mes de mayo, es un negocio familiar. Produce biogás íntegramente a partir de residuos orgánicos industriales, algo de lo que la familia Ligato se enorgullece. Cuando a los Ligatos se les ocurrió la idea hace siete años, su objetivo era crear la huella de carbono y el impacto en el medio ambiente más pequeños posibles en su planta avícola.

“Aunque esta no es la primera planta de biogás en la provincia, es la primera con este concepto de generar 100 por ciento de energía a partir de residuos orgánicos industriales”, dijo a TRT Mundo el presidente de la empresa, Mateo Ligato, en la planta.

Florencia Balena, ingeniera jefe de la planta, señala que los «biodigestores» comen todo lo que sale del proceso de producción de alimentos, ya sea en forma líquida o sólida. «Son desechos de la producción de carne o de aves de corral, o bebidas pútridas como la cerveza o el vino».

Los biodigestores generalmente requieren un porcentaje de cultivos como el maíz para mantener la entrada estable. Pero Helios ha tomado la línea dura de usar solo desechos industriales biológicos, enfocándose no solo en la generación de biogás/energía sino también en la gestión de desechos orgánicos industriales.

Las leyes ambientales se han endurecido recientemente. Muchas empresas en Argentina se ven obligadas a mejorar su gestión de residuos de producción. La planta Helios aprovechó para ofrecerles una solución, al convertir el biogás que produce en electricidad que vende al gobierno a través de un nuevo proyecto.

Argentina tiene los recursos de energía renovable más abundantes de América Latina: viento constante en el sur de la Patagonia, sol durante todo el año en el extremo noroeste y energía hidroeléctrica y biomasa alimentadas por ríos y vastas tierras de cultivo.

Un paso Ley de Medio Ambiente de 2015Un desafío importante es que la energía renovable alcance el 20 por ciento de la producción total de energía del país para 2025, lo que actualmente refleja aprox. 13 por ciento del consumo energético del país.

Para lograr este objetivo, el gobierno ha lanzado una iniciativa llamada RenovAr, Español para ‘regenerar’. El programa tiene como objetivo facilitar el desarrollo de plantas y sistemas de almacenamiento de energía limpia a través de licitaciones públicas periódicas, que permitan a las empresas poner en marcha sus proyectos de producción de energía, así como conectarlos a la red nacional, brindando a las empresas participantes beneficios fiscales y la posibilidad de participar. En los mercados de créditos de carbono.

Están diseñados como un medio para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero mediante la creación de un mercado donde las empresas pueden negociar sus permisos de emisión.

De acuerdo a Para datos oficiales Entre las energías renovables, la tecnología que más contribuyó a la producción de energía en Argentina en 2021 fue la eólica (74 %), seguida de la solar fotovoltaica (13 %), los pequeños sistemas hidráulicos (7 %) y la bioenergía, lo que hace que esta última sea atractiva. Una fuente de energía en gran parte sin explotar en el Sur.

Todo se usa, nada se desperdicia.

Actualmente hay casi 40 plantas de producción de bioenergía en Argentina.

Ligato dice que se inspiró en las plantas de Europa, particularmente en Italia, que utiliza los principios de la economía circular, así como en las plantas de biogás de Argentina.

“Empecé a estudiar cómo podíamos hacerlo con nuestros propios desechos, así que el proyecto creció a partir de ahí”, dice Ligato.

La introducción del programa RenovAr permitió que la planta contribuyera con energía al mercado mayorista y cambió la decisión de inversión de Ligato.

«Soy un adulto y tengo hijos. Empecé a preguntarme si estoy haciendo todo lo posible para brindar un mundo mejor para mis hijos y su generación», dice Ligato. «Creo que se lo debemos a su generación».

Al principio, pensaron en usar maíz picado para generar energía, pero rápidamente desecharon la idea.

«Realmente no sabemos cómo generar energía a partir de los alimentos», dice Ligato, quien ha estado involucrado en la industria avícola durante mucho tiempo.

La planta de Helios cuenta con cuatro biodigestores capaces de convertir más de 130.000 toneladas de residuos orgánicos en biogás. Puede generar 2,4 MW de electricidad para la red nacional.

Además, la planta utilizó un sistema de recuperación de calor para mantener los biodigestores a una temperatura óptima sin necesidad de generación de calor externa, lo que la convierte en la primera central de biogás de América Latina.

La planta también produce biofertilizantes sólidos y líquidos para uso propio de la empresa.

“Para mí es como Disney World”, dice Palena, el ingeniero químico responsable de supervisar cada parte del proceso que alimenta los cuatro biodigestores.

“Es fácil trabajar con cultivos u otras plantas, pero nuestro desafío es evitar eso y usar solo desechos industriales orgánicos”, agrega Palena, que puede ser el insumo más sustentable en los biodigestores.

Actualmente, Helios recibe 30 toneladas de residuos por día y los convierte en energía, pero tiene capacidad para recibir hasta 300 toneladas por día.

“En nuestro caso, vamos a emitir un certificado de disposición final, mediante el cual las fábricas que nos envían residuos certifican que sus residuos están siendo utilizados para generar energía limpia”, explica Ligato.

Potencial de biogás de Argentina

George Hilbert, experto en biogás recién retirado del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), cree que la producción de biogás en el país debe integrarse con la producción agrícola.

“Como importante productor de alimentos y cultivos, Argentina tiene problemas de escasez de nutrientes en el suelo, y enfrenta la degradación del suelo y el uso excesivo de agroquímicos”, explica Hilbert.

“Además de este problema somos importadores de gas fósil. Todos estos problemas pueden resolverse parcialmente mediante la producción adecuada de biogás y sus productos derivados como fertilizantes sólidos, líquidos y foliares”, agrega.

«Esta tecnología ofrece soluciones a todos estos problemas».

Fuente: TRT Mundo