Con el objetivo de reparar un desperfecto en la central nuclear Atucha II, científicos argentinos están desarrollando herramientas que podrían ser exportables a nivel mundial para aplicarlas en otros reactores nucleares.
Recientemente se anunció que científicos argentinos iniciarán la reparación de un desperfecto que mantiene detenida la operación de la central nuclear Atucha II desde octubre del 2023. Dichas herramientas podrían aplicarse en otros reactores nucleares en un futuro.
En un principio el titular de la empresa Nucleoeléctrica Argentina, José Luis Antúnez, explicó que “el inconveniente es muy simple y en circunstancias normales se hubiera reparado en dos semanas. El problema es que se produjo en el fondo del reactor de la central, el lugar de más difícil acceso por su distancia, por la dificultad de llegar y además porque hay que realizarlo bajo agua”.
Pero la situación se extendió y la solución que proponen los fabricantes extranjeros representaría grandes pérdidas para la central.
A raíz de esto, la ingeniera nuclear, Julieta Romero, explicó que lo que pasó en Atucha II fue que se produjo un desperfecto a causa de que “se soltó una pieza en la parte infeior del reactor”.
“Lo que pasó es que se desprendió una pieza en la parte inferior del reactor que visto a grandes rasgos es algo similar a un balde a dentro de otro balde con un espacio entre medio, entonces el fabricante lo que sugirió fue desarmar todo el “balde” interior para poder retirar la pieza, porque la base de esa parte interna tiene una especie de agujeros, pero son demasiado pequeños para poder sacar la pieza”, explicó Romero.
Cabe destacar que la solución propuesta por los diseñadores del reactor, conlleva un procedimiento de altísima complejidad y además generaría que la central permanezca sin producción durante al menos tres años, ocasionando pérdidas económicas de alrededor de 400 millones de dólares.
Por eso motivo, “desde Argentina se empezaron a buscar herramientas para poder cortar en pedacitos esa pieza que hay que sacar y poder retirarla por los agujeros que tiene el balde, es una solución bastante inteligente, pero se requería crear herramientas para poder hacerlo”.
“Finalmente eso sucedió y hoy en día lo que están haciendo es desarrollar esas herramientas, todo con industria argentina, para justamente cortar esa pieza debajo del agua y retirarla por esos agujeros que tiene el reactor en la parte inferior”, añadió.
Asimismo, la Ingeniera destacó que esto representa un gran avance porque “no solo que se nos ocurrió a nivel país una nueva solución, sino que se genera industria argentina que después sirve para exportarla porque básicamente lo que se creó es una manera remota de poder solucionar este tipo de problemas”.
Específicamente, lo que se tiene que desarrollar son herramientas que puedan funcionar debajo del agua, debido la parte interna del reactor está sumergida, y tienen que tener más de 14 metros de largo.
Por otro lado, cabe mencionar que actualmente el 7% de la producción energética del país proviene de la energía nuclear y que de las tres centrales nucleares que existen en territorio argentino (Atucha I, Atucha II y Embalse), Atucha II es la que más capacidad tiene.
“Atucha II es la más grande de las tres, Atucha I tiene una capacidad de 362 MW eléctricos, Embalse tiene alrededor de 650 y Atucha 2 tiene 745, lo que es una parte muy importante dentro de este 7% de energía nuclear que alimenta a la red eléctrica argentina”, manifestó Romero.
Asimismo, no es un detalle menor que la energía nuclear es una de las más limpias que existe, después de las renovables, debido a que durante su producción no se generan gases de efecto invernadero.
Finalmente, desde la central nuclear precisaron que para la reparación del reactor, la cual iniciará a mediados de junio a cargo de la empresa Nucleoeléctrica Argentina, se emplearán alrededor 200 personas que trabajarán durante dos semanas con un presumiendo estimado de 20 millones de dólares.
Fuente: https://www.codigobaires.com.ar/herramientas-reparar-reactores-nucleares/