22 de noviembre de 2024

Por qué las plantas solares flotantes pueden revolucionar la producción de energía global.

Un estudio publicado en ‘Nature Sustainaility’ sugiere que este tipo de instalaciones llegaría a generar 9.434 teravatios hora anuales, lo que podría dar abastecer a ciudades en un total de 124 países

La instalación de plantas solares flotantes puede dar un nuevo impulso a la producción de energías limpias. Estos sistemas fotovoltaicos flotantes (FPV) conseguirían solucionar en parte el problema de la cantidad de superificie que los sistemas solares tradicionales montados en el suelo precisan y además, según un estudio publicado en Nature Sustainability, podrían generar hasta 9.434 teravatios hora de energía al año.

A este máximo productivo se llegaría, según el mismo estudio, si se cubriera el 30% de la superficie de los 115.000 embalses del mundo, sin considerar si eso es factible o si generaría otro tipo de problemas de conservación de esos espacios.

Si se lograran esas cifras, eso supondría la autonomía energética de varias ciudades. “Teniendo en cuenta la proximidad de la mayoría de los embalses a los centros de población y el potencial para desarrollar sistemas de energía locales dedicados, encontramos que 6.256 comunidades y/o ciudades en 124 países, incluidas 154 metrópolis, podrían ser autosuficientes con plantas FPV locales”, aseguran los científicos autores del estudio.

Las ventajas de la instalación de plantas solares flotantes no terminarían ahí. De acuerdo con este estudio, este tipo de instalaciones también podrían evitar la pérdida de agua por evaporación. Según sus hallazgos, instalar tanta energía solar ahorraría agua suficiente para abastecer a trescientos millones de personas al año.

Estos científicos también llegan a la conclusión de que los FPV en embalses son ventajosos sobre los sistemas solares tradicionales montados en el suelo en términos de conservación de la tierra, mejora de la eficiencia y reducción de la pérdida de agua.

Los investigadores creen que el estudio era imprescindible, después del creciente uso global de energía y la adopción de objetivos de sostenibilidad para limitar las emisiones de carbono con una fuerte demanda de energías limpias, incluida la solar. 

Pese a sus resultados, los autores también reconocen que se necesitan estudios adicionales para evaluar las posibles consecuencias a largo plazo de este sistema que seguramente tendría consecuencias con la reducción de radiación solar que se llegaría al agua que quedase debajo de las placas.

España también está dando pasos en ese sentido. Tras la exposición pública del Real Decreto que regula la instalación de plantas fotovoltaicas flotantes, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) habla de que estas infraestructuras supondrán “un impulso a la capacidad de generación eléctrica de origen renovable, algo fundamental para acelerar la transición energética y reducir la vulnerabilidad de nuestro país a situaciones excepcionales como la que vivimos hoy”, en referencia a la dependencia energética y a la guerra en Ucrania.

Además, defiende el Miteco, facilitará la consecución de los objetivos recogidos en la Ley de cambio climático y transición energética, que prevé alcanzar un 42% de penetración de energías renovables en el consumo final y un sistema eléctrico con un 74% de generación renovable para 2030.

“Esta capacidad solar flotante se sumará a la energía producida por las centrales hidroeléctricas y permitirá aumentar la producción de las instalaciones y optimizar las infraestructuras de evacuación”, aseguran desde el ministerio encabezado por Teresa Ribera. 

Fuente: https://www.lavanguardia.com/natural/energia/20230315/8826665/plantas-solares-flotantes-revolucionar-energia-global-pmv.html