La cifra corresponde a la evolución del índice adelantado del CEP XXI, en base a datos de CAMESSA sobre consumo de energía. Según los datos disponibles hasta el momento, la mejora estuvo impulsada por la producción siderúrgica, metalmecánica y automotriz.
Un informe del Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI), dependiente del Ministerio de Desarrollo Productivo, reflejó que la industria creció 6,1% anual en diciembre de 2020, en base a datos de consumo de energía registrados por CAMMESA.
De acuerdo con los datos disponibles hasta el momento, la mejora estuvo impulsada en gran parte por el sector siderúrgico, que mostró incrementos de dos dígitos en todos sus segmentos (acero crudo, hierro, laminados en caliente y laminados en frío).
A su vez, dicho rubro fue impulsado por una buena performance de la producción metalmecánica, por un salto del 107,7% en la producción de vehículos, debido a una mayor demanda y porque en diciembre de 2019 había más plantas paradas por el receso vacacional, y por un nuevo repunte de la construcción, según indicadores de la cámara del sector que mostraron un mayor porcentaje de obras normalizadas.
Adicionalmente, desde el CEP destacaron que en los primeros trece días de 2021 la tendencia al alza se intensificó, ya que el consumo de energía en dicho período fue el mayor en la última década. No obstante, aclararon que esto puede haber estado muy relacionado con un «verano anómalo» producto de una menor parada de plantas que en otros eneros, luego de un año atravesado por una pandemia que generó algunos meses de paralización casi total en la producción.
Por otra parte, el informe resaltó que en octubre se observaron 4.500 empleos formales industriales más que en febrero, previo a la llegada del coronavirus, y que se encadenaron cinco meses consecutivos con crecimiento en el empleo del sector, algo que no ocurría desde 2015.
Cabe recordar que, según los últimos datos oficiales del INDEC, en noviembre la producción industrial creció un 4,5% en términos anuales, lo cual significó el incremento más alto desde marzo de 2018.
El ascenso estuvo traccionado fundamentalmente por una mayor fabricación de maquinaria agrícola y de aparatos de uso doméstico, como heladeras, lavarropas y cocinas, una mayor producción de celulares y de autos para el mercado interno, y mejoras en los rubros de alimentos y bebidas y minerales no metálicos, este último impulsado por los pedidos del sector de la construcción.
En ese marco, la industria utilizó el 63,3% de su capacidad instalada, el nivel más alto desde noviembre de 2018 y casi 4 puntos porcentuales por encima de los niveles pre pandemia.
Fuente: Ámbito